domingo, 20 de septiembre de 2015

Crónica de la III Diez Mil "Entre Palomares"

Esta mañana se celebró en la localidad zamorana de Villarrín de Campos la III Carrera Popular "Entre Palomares", una prueba que, aunque no ha tenido cifras estratosféricas de participación, sí ha tenido a un buen número de atletas en la línea de salida de las diferentes categorías, una participación quizá un poco mermada por las dos competiciones que hubo ayer en Zamora capital y en Benavente, y por la concidencia con la Media Maratón de Valladolid. 
En mi caso, decidí animarme a competir en esta prueba. Por Villarrín he pasado en alguna ocasión en bici, pero nunca antes había estado allí corriendo, así que hoy era una buena oportunidad para lograrlo. La competición tenía buena pinta, un circuito de 10.000 metros (luego, la organización comunicó que serían 10.300, y según el Garmin salieron 10170..) sin tener que dar vueltas, algo muy a tener en cuenta para los que no nos gusta tener que pasar varias veces por el mismo sitio, y, además, sin grandes densiveles. El único problema aparente podía ser el circuito, por tierra, que presentó algunas zonas con charcos y barro, pero éso es algo imprevisible, así que creo que en esto, nada que objetar a la organización. Lo que no me gustó nada fue la organización que pusieron con la salida de la categoría Absoluta y los Andarines, arrancando primero los que iban a caminar. El problema fue que compartíamos sino todo, los primeros kilómetros del circuito, algo que a mi me resultó incómodo, teniendo que hacer algún entre dos filas de andarines o "serpenteando". Un punto sin duda para mejorar de cara a otras ediciones de la prueba. La recogida de dorsales, pues una recogida de dorsales más, con mucha gente y buen trato por parte de los organizadores. Y sobre la bolsa de corredor, pues no estaba mal, con una camiseta (técnica, no de algodón), una cuña de queso, un bocata... 
Personalmente, venía con intención de correr lo mejor posible para ver cómo me notaba tras los primeros entrenamientos de calidad de esta temporada. Tras recoger el dorsal y calentar en compañía de Tinin, llegó el momento de la verdad. Tras el pequeño chasco que me llevé en La Zarza de Pumareda, habiendo hecho solo rodajes y compitiendo ese día con catarro, hoy, ya con más entrenamientos de calidad y sin catarro, aunque habiendo dormido más bien mal, hoy sabía que estaba en condiciones de correr más rápido que en aquella competición.
Tras la salida, se formó un grupo con varios integrantes. Se me ocurrió meterme, me encontraba cómodo a ese ritmo, aunque iba intentando analizar los ligeros cambios que se iban produciendo, intentando no quemar cartuchos antes de tiempo. Jorge dio un cambio en los primeros kilómetros, llevándose con él a Luis. Mientras tanto, por detrás nos quedábamos Raul, Rabadán, Rubén y el que escribe. Se trataba de intentar correr lo mejor posible para intentar llegar a meta en el tercer puesto de la Absoluta, así que pocos errores podía cometer. Decidí quedarme en el grupo hasta llegar a Otero y desde allí, tirar hasta Villarrín. Si salía y podía llegar, pues bien, sino, no pasaba nada, ya lo intentaríamos en otra prueba. Uno de esos privilegios que tenemos los populares. Durante esos últimos cuatro kilómetros me tocó sufrir para poder mantener el puesto. Veía que traía a Rubén muy, muy cerca, y la verdad es que tenía serias dudas sobre si llegaría o no entre los tres primeros. Al final, con una paliza interesante durante esos últimos kilómetros, conseguí entrar en el tercer puesto, siendo además segundo Senior. El Garmin marcó los siguientes datos: 10170 metros en 36'37", a 3.36 min/km y 193 pulsaciones medias. 
La verdad, hoy me he notado bastante bien durante toda la competición, y creo que el balance puede ser bastante positivo, aunque aun me queda mucho trabajo por delante para poder volver a tocar ritmos de 3.20. Pero bueno, aquí no hay más misterio, entrenar y tener paciencia, es la única forma de que lleguen los resultados. Hoy las sensaciones positivas me han servido para aumentar un poquito más las ganas para seguir entrenando y compitiendo, pero no deja de ser un puntito más dentro del proyecto de volver a la competición. Me he dado cuenta, además, de que el ambiente que hay en las pruebas populares de este tipo o la forma de competir, independientemente del resultado, me gustan mucho más que las federadas, donde el ambiente es completamente diferente, cada uno vamos a lo nuestro y punto, no hay tiempo para mucho más. 
Y antes de despedirme. La semana que viene toca comenzar un plan con entrenamientos más serios. Viéndolo por encima, hay días de rodaje en los que me costará contenerme, pero hay que hacerlos para poder recuperar. Ahora nos toca empezar ya a meter más sesiones fuertes, y, salvo los domingos, a reducir el kilometraje de los rodajes, que serán de 10 kilómetros entre semana y de 18 los domingos. También hay programadas cuestas y series, tanto largas como cortas. Os iré informando de cómo voy cumpliendo el plan.
Nos vemos... haciendo deporte, claro.

No hay comentarios: