lunes, 28 de marzo de 2016

Volvemos a escribir

Llevo varios días sin publicar en el blog, algo que no me gusta en exceso. Mi idea era publicar un artículo relacionado con el boom de las carreras populares y los negocios que se están montando a su alrededor, pero aun está a medias, por lo que hoy me tocará improvisar la entrada. No sé muy bien de qué voy a hablar, pero, como siempre digo, espero no aburrir o, por lo menos, no hacerlo en exceso.

Al acabar el módulo que estaba haciendo, decidí apuntarme en el mes de enero a un curso de Celador sanitario para evitar estar parado y, mientras tanto, aprovechar para pensar si preparo las oposiciones o me decido a intentar acceder al módulo superior. Estos últimos días han sido de prácticas en el Hospital de Zamora, y la verdad es que ha sido algo muy gratificante encontrarme con varios compañeros con los que coincidí haciendo las prácticas del módulo de grado medio. Volví a estar un par de días en una de las plantas en las que estuve haciendo las prácticas de TCAE, y luego, me animé a ir a visitar a los compañeros de la otra. Han sido unos días de lo más entretenido, aunque debo reconocer que, algún día, me ha tocado hacer malabares. Por las tardes, aparte de entrenar, estoy con el tema de la autoescuela. Durante la parte teórica de este último curso, me cambiaron la hora un par de días para las prácticas del coche, y no tuve ningún problema en salir a mediodía, pues el horario se me adaptaba bastante bien, y podía rodar al salir de clase, comer con tranquilidad y marcharme a la autoescuela; sin embargo, en las prácticas acabábamos en horario laboral, lo que me limitaba mucho más el horario. La semana pasada me tocó entrenar un par de días a mediodía, y la verdad es que casi salía por el portal con la comida de la mano. Pero, pese a todo, la verdad es que han sido unos días de los más interesantes, que me han permitido estar metido en los dos mundillos que más me gustan, el deporte y la sanidad.

Metiéndonos de nuevo en el mundillo del entrenamiento, la semana pasada, con la historia de tener que salir a mediodía martes y miércoles, y el que el jueves las piernas no estaban para demasiados alardes, la he pasado sin completar las series marcas. La verdad es que fue una semana un tanto anárquica, las cosas como son. Ya comencé mal le lunes, haciendo casi cuatro kilómetros más de los que tenía pensado, aunque, por lo menos, cumplieron con el objetivo principal: despejarme. El martes tenía previsto hacer unas cuantas series, pero como que no me llamaba en exceso hacer unos miles en ayunas, así que opté por irme a rodar por sensaciones, completando otros 14 kilómetros. El miércoles, fue tres cuartos de lo mismo, aunque algo más largo, acabando con 16. El jueves, ya pudiendo entrenar por la mañana, arranqué con la idea de rodar 13 muy suaves y para casa, aunque, según fui entrando en calor, las sensaciones fueron mejorando, así que decidí alargar el rodaje algo más, acabando con otros 14. El viernes, descansé, lo que aproveché para ir a ver la procesión de por la mañana, para mi, una de las más llamativas. El sábado decidí salir a rodar de nuevo por sensaciones, a lo que saliera. Me fui a dar una parte de la vuelta a Cabañales, completando otros 15 kilómetros. El domingo, para completar, la tirada larga, otros 19 y, cómo no, por sensaciones. Para seguir, hoy comencé otra nueva semana con un rodaje de 13 kilómetros justos a menos de 4'15 de media, algo que, la verdad, no me esperaba, sabiendo que durante los últimos 6.5 kilómetros el aire no iba a ser favorable. Hoy me fui a rodar por el carril bici, sin pensar demasiado la ruta: rodar la mitad a la ida y la otra mitad, pues de vuelta. Los primeros kilómetros fueron con aire a favor, una gozada. Lo malo fue la última mitad, donde fui todo el rato con él en contra. Aun así, no me noté excesivamente mal.

Pasado el entrenamiento de esta mañana, toca ir ya mirando a los próximos entrenos. La verdad es que tengo la sensación de que estos días voy a tener que acabar rodando. Normalmente, los días de series vengo empleando entre calentamiento, recuperaciones, series, estirar y demás algo así como hora y cuarto. Podría entrenar por la tarde, pero prefiero hacerlo por la mañana, ahora que puedo, pues prefiero entrenar a primera hora del día que no, como me toca en invierno, de noche, y saliendo por la mañana, me toca combinarlo con las clases de la autoescuela, así que, como rodando sé cuánto voy a tardar, puedo hacer cálculos bastante ajustados para entrenar a gusto y llegar bien a la autoescuela. Lo más probable será que, por lo menos esta semana, haga eso, luego, iré viendo cómo vamos organizando.

Objetivos competitivos, por ahora tengo alguno. Quería correr en Faramontanos de Tábara, Toro y Sardón de los Frailes. Me llama sobre todo la última, pues por esa zona ya he corrido un par de veces (Bañobárez y La Zarza) y la verdad es que me ha encantado cómo organizan los eventos deportivos, por lo menos los que yo conozco. La zona es durilla, y seguro que nos meten algún repecho bueno, pero sarna con gusto no pica. De las otras dos, Faramontanos me resulta interesante, y a Toro voy por la distancia, un 10.000 cerca de Zamora no se tiene todos los días. La verdad es que viendo cómo estoy entrenando, no aspiro a demasiado, solo a disfrutarlo y a recibir algún palo de los buenos. Pero ya habrá tiempo de correr más rápido.

Nos vemos... haciendo deporte, claro.

domingo, 20 de marzo de 2016

Semana Santa y entrenos

Ya estamos metidos en pleno mes de marzo. Poco a poco van pasando los días. Desde el domingo no había vuelto a publicar nada en el blog. Debo reconocer que hoy lo hago con ganas de escribir, y con alguna idea en la cabeza. A los típicos comentarios que suelo hacer sobre deporte, le uno también la Semana Santa de Zamora. ¿Qué saldrá de esta? ¡Espero que algo bueno!

Zamora se encuentra, como cada año, metida en su Semana Santa, la que es, por muchos, una de las mejores de nuestro país. No voy a entrar en ese tema, pero debo reconocer que, con la llegada de estas fechas, la ciudad cambia, muta. Por unos cuantos días, Zamora pasa a ser una ciudad con un cierto olor a religión y a tradición. Religión porque la Semana Santa es, sobre todo, una celebración cristiana, y tradición, porque la ciudad ahora también huele a aceitadas, rebojos y sopas de ajo, esos alimentos que se han comido en la ciudad y en la provincia, y que, en los últimos años, muchos turistas aprovechan para comprar no solo para ellos, sino también para sus familiares, amigos y conocidos.

En mi caso particular, debo reconocer que soy de ir a ver pocas procesiones, y a las escasas que voy, prácticamente son todos los años las mismas. Busco procesiones que me transmitan el puro sentimiento de la Semana Santa de Zamora. Son muchas las procesiones que lo transmiten, las cosas como son, aunque yo me decanto por algunas en concreto, como puede ser la procesión de las Capas Pardas. No deja de ser una de las más humildes de la ciudad, pero, con todo, me transmite una sensación impresionante. Ver transitar a todos sus cofrades con ese traje tan particular por zonas donde casi podríamos decir que es su propia iluminación la que alumbra el recorrido que hará la cofradía y con un paso tan sencillo pero a la vez que tanto me dice, hace de esta procesión una de mis favoritas. Y aunque no es una procesión como tal, destacaría el Traslado del Mozo de San Frontis, también conocido como el Nazareno de San Frontis. Esa figura me resulta impresionante, la verdad. Desde bien pequeño me ha llamado la atención. Y es que, sin ninguna duda, para mi es, posiblemente, el paso que más sentimientos por segundo me transmite. Y otra de mis favoritas es la del Viernes Santo. Son unos cuantos pasos, pero me encanta acercarme hasta la Catedral para echarles un vistazo a todos ellos. 

Cambiando por completo de tema, esta semana está siendo bastante interesante en cuanto a entrenamientos. Tras la Media Maratón de Zamora, debo reconocer que me he encontrado bastante bien entrenando. Esta semana creo que ha sido muy positiva, entrenando por norma general con muy buenas sensaciones. El lunes, tras correr el domingo los 21 kilómetros, comencé rodando 10 kilómetros a ritmo cómodo, completándolos en 45'33, a 4.33 min/km y 153 pulsaciones medias. El martes me puse manos a la obra con la primera sesión de series de la semana. La idea era hacer 3000-1000-3000, así que, tras el correspondiente calentamiento, con un rodaje de cinco kilómetros y unas progresiones, me puse manos a la obra. De los tiempos, creo poder decir que fueron bastante buenos, tocando ritmos entre 3'20 y 3'30. Los de cada serie fueron: 10'32-3'23, 10'33. Para soltar, otros dos kilómetros suaves. El miércoles nos tocaba rodar de nuevo, así que me puse manos a la obra con una vuelta por la zona de los Tres Árboles y el bosque de Valorio, donde aproveche para ir a subir una de mis cuestas favoritas, completando un total de 16 kilómetros justos en 1h10'11, a 4.23 min/km y 161 pulsaciones medias. Siguiendo con lo marcado en el plan, el miércoles me puse manos a la obra con unas series, aunque casi fue más un rodaje a ritmo controlado que una sesión de series. Tras el correspondiente calentamiento, también de cinco kilómetros, comencé con lo serio. La idea era hacer 3x3000. Eso hice, haciendo los siguientes tiempos: 10'44, 11'02-11'16. Para soltar, un kilómetro suave. El viernes tocó descanso. El sábado me calcé de nuevo las zapatillas para hacer otra sesión de series, en esta ocasión de 2000. Volví a calentar cinco kilómetros para luego completar cuatro series de dos kilómetros. Los tiempos fueron: 6'58, 7'06, 7'18 y 7'23. Para soltar, otros dos kilómetros. Para completar la semana, hoy tocó hacer la tirada larga de esta semana, 19 kilómetros. Tras un par de semanas que no tocaba la vuelta a Cabañales, hoy me animé a hacerla. De no haber sido por una zapatilla, que fue algo floja en los últimos siete-ocho kilómetros, la verdad es que el rodaje hubiera estado de cine. Al final, completé un poquito más de los 19 kilómetros marcados en 1h24'09, a 4.22 min/km y 162 pulsaciones medias.

Con el rodaje de hoy, completo la segunda semana de entrenamientos del plan de entrenamiento. Ahora toca ir a por una tercera semana que se presenta bastante dura, para luego hacer una cuarta bastante suave para recuperar de estas tres semanas previas. Al igual que esta semana, van a ser tres días de calidad, tres de rodaje y uno de descanso. No estaría nada mal tener las mismas buenas sensaciones que he tenido esta semana, en la cual creo no poder quejarme de cómo me he notado. Por lo demás, no tengo, por ahora, demasiados objetivos competitivos a corto plazo, aunque sí tengo alguna carrera en mente en la que me gustaría participar y dar bastante cera.

Nos vemos... haciendo deporte, claro.

domingo, 13 de marzo de 2016

XXXII Media Maratón "Ciudad de Zamora"-Crónica

Hoy me pongo a escribir con un gran sabor de boca. Esta mañana se celebró la XXXII Media Maratón "Ciudad de Zamora", con victoria para Jorge Rodríguez (Atletismo La Bañeza) con 1h09'51 en la categoría masculina y para Andrea Román (Atletaria Isaac Viciosa) en mujeres, con 1h23'42. Ésta ha sido mi primera Media de Zamora, y la verdad es que he acabado muy, muy contento por diversos motivos. 
Recién pasado el kilómetro 20.
Ayer por la tarde me acerqué a la Ciudad Deportiva a recoger mi dorsal. Allí me encontré con "viejos" conocidos, con muchos de los cuales he compartido muchos y muy buenos kilómetros. La bolsa de corredor que se nos entregaba con el dorsal, la verdad es que muy, muy completa para el precio que habíamos tenido que pagar (12-15 euros, según en qué fechas nos hayamos inscrito), con garbanzos, queso, una camiseta técnica, una botella de vino y unos cuantos papeles informativos sobre Zamora, la Media Maratón de Zamora y la Maratón de los Montes Torozos. Además, la prueba constaba de servicio de guardarropa, un circuito bastante llevadero (aunque yo fui el primero en sufrir la falta de confianza en la subida de Rabiche) y la compañía de varios ciclistas a lo largo del recorrido. ¿Qué más pedir? La única pega que pongo, es que me gustaría que los chips, en vez de llevarse en una zapatilla, pudieran llevarse en el dorsal. Por lo demás, una carrera muy bien organizada, con muy buen trato hacia el corredor. 
A escasos metros del kilómetro nueve. Aun nos quedaba más de
media carrera por delante. (Foto: Zamora24horas).
Esta mañana, tocó madrugar para desayunar temprano y evitar así posibles problemas de flato y demás. Tras acercarme un momento a la Ciudad Deportiva a ver a los compañeros del Atletismo Zamora que volverían a repartir dorsales, marché hasta la Plaza Mayor para ir viendo cómo, poco a poco, ésta se iba llenando cada vez de más y más participantes. Por allí pude reencontarme también con "viejos" conocidos. Uno de estos encuentros fue con Agustín Ruiz, a quien hacía muchísimo tiempo que no veía, y con varios compañeros de Bicizamora a los cuales, tras dejar la bicicleta de lado, no había vuelto a ver, o, por lo menos, no había visto todo lo que me hubiera gustado. Un poquito antes de la salida, cambio de ropa y a esperar a que nos dieran el disparo. No quise colocarme delante, para evitar estorbar a los que realmente iban a disputar esta carrera. Poco a poco, los nervios se nos iban acumulando, hasta que, por fin, nos dieron la salida. Me pilló algo de "embudo", aunque, aun así, el primer kilómetro no salió demasiado lento (4.56, si no recuerdo mal). Decidí que no había que cebarse en los primeros kilómetros, sino dejar que el cuerpo fuera calentando y, con el paso del tiempo, ir incrementando el ritmo. Así lo hice. Hasta el kilómetro cuatro, el circuito es muy favorable, plano y hacia abajo, lo que a mi no me acababa de gustar, pues salí sin calentar nada y en los tramos para abajo no me acababa de encontrar cómodo. A partir de ese kilómetro, y hasta pasado el ocho, nos tocó  ir rodando por el carril bici, a orillas del Duero, una zona muy plana, donde pude acabar de calentar ya más a gusto. A partir de ahí, a subir poco a poco, siempre controlando el ritmo y el pulso, aunque siempre teniendo presente que, al fin y al cabo, si las piernas iban a ir bien, acabaría tensando lo que ellas me dejaran. Al paso por el kilómetro nueve, mi madre, junto a varios compañeros del Club Atletismo Zamora, nos estaban animando. "¿Cómo vas?" "Bien, voy bien". Continuamos hacia el centro de la ciudad, para hacer, en el 13, el primer paso por el Puente de los Poetas. Hasta ahí, solo habíamos tenido la subida hasta Cristo Rey, algo que, sabiendo dosificarse, podía pasarse sin dificultad. La historia vendría un kilómetro más adelante, en el 14, cuando nos enfretábamos a la subida del Camino de Rabiche. en mi caso, la empecé algo fuerte, lo que me hizo sufrir algo más de lo pensado en los dos siguientes kilómetros. Al segundo paso por el Puente de los Poetas, los primeros ya habían llegado hacía un rato. Me vino mi padre de frente con la bici, y para acabar esos últimos tres últimos kilómetros, me acompañó. Yo ya empezaba a ir algo justo de fuerzas, y, de no haber sido por su compañía, dándome algo de conversación, lo hubiera pasado bastante peor. En el kilómetro 19, mi hermano. ¡Vaya, para la única botella que cojo en un avituallamiento, y se me fue al suelo! Le prometí que entraría conmigo en meta, pero no pudo ser, así que le dije que le cogería la botella... ¡y se me fue al suelo! Vaya disgusto me llevé... Seguimos rodando ya hacia el 21. Se pone mi padre a mi altura. "Oye, ¿entras conmigo en la meta?" "Vale... no ha podido ser con tu hermano... pues entras conmigo". A la entrada en la pista de atletismo de la Ciudad Deportiva, me olvido de subir el ritmo para intentar mejorar el puesto, al fin y al cabo, no me juego nada y he tenido 21 kilómetros para buscarlo. Se puso mi padre a mi altura. "Dame la mano, ya verás que entrada más chula". Al final, los datos del Garmin fueron 21.44 kilómetros en 1h30'54, a 4.14 min/km y 164 pulsaciones medias.
Llegada a meta con mi padre. (Foto: Javier Bernal).
Debo reconocer que ha sido una mañana muy positiva, y que me ha subido muchísimo la moral. La marca y la clasificación han sido lo de menos, lo importante es que he disfrutado de correr 21 kilómetros por las calles de mi ciudad, rodeado de muchísimos amigos y conocidos. Hoy me permití la licencia de ir hablando en carrera con varios de los conocidos que me iba encontrando... ¡si hasta saludaba a los espectadores que conocía! Vamos, que hoy sí puedo decir que he DISFRUTADO del atletismo. A la llegada a meta, a comentar la jugada con varios de los compañeros. Y aprovecho este párrafo para agradecer a mi padre, a Carmelo y a Ángel Sánchez la charleta que nos trajimos una vez que llegué a meta. Da gusto hablar con estos tres sobre atletismo... y lo que no es atletismo. ¡Pero qué grandes sois, socios!
Los datos del Garmin.
Con la carrera de hoy por las calles de Zamora, he completado la primera semana de entrenamientos de mi nuevo plan de entrenamiento. Sumando lo de hoy, he acabado con unos 90 kilómetros, haciendo cuatro días de rodaje (incluido el regenerativo del lunes) y dos de series, que han sido martes y jueves. Ahora, nos toca pensar en otra nueva semana de entrenamientos de cara a ir mejorando la forma. Mi objetivo será el de siempre, ir a por los 33' en el 10.000. Pero, antes, me tocará trabajar mucho la cabeza para no saltarme los entrenamientos de series marcados. 

Nos vemos... haciendo deporte, claro.

jueves, 10 de marzo de 2016

Comentarios sobre la Media Maratón "Ciudad de Zamora"

El domingo que viene se celebrará la XXXII Media Maratón "Ciudad de Zamora". Como quien no quiere la cosa, ya han pasado nada más y nada menos que 32 años desde que en aquel 1984 un grupo de "locos" se decidieran a organizar una prueba de 21 kilómetros por las calles de Zamora. De tan solo 23 corredores, hemos pasado a tener una participación que supera los 500 inscritos. En 32 años hemos podido ver muchas, pero muchas generaciones de atletas y también, ese cambio de percepción del atletismo, de cómo las carreras han pasado de ser éso, carreras, a ser eventos populares donde unos se dedican a salir a ganar, mientras que otro grupo cada vez más nutrido sale a disfrutar de la competición, independientemente del tiempo que hagan en meta. Hoy, me gustaría dedicarle esta entrada a la Media de Zamora, y a todos sus participantes.
Podio de la Media Maratón de 2014. (Foto: Zamora24horas).
En aquel 1984 tan solo salieron 23 participantes. En esta primera edición, el circuito no llegó a medir los 21 kilómetros de los que constan estas pruebas, sino que fueron unos 19. La victoria correspondió al atleta Aníbal Rapado, con un tiempo de 56'55", siendo segundo Santiago Arias y tercero Miguel Ángel López. En esta ocasión, pudimos ver rostros muy conocidos dentro de las carreras de la zona, y todos ellos con mucha calidad. Muchos de los participantes completaron los 19 kilómetros con apenas 16 años, como fue el caso de Ramiro Morán, obstaculista y campeón de España de Media Maratón en 2002 en a Media de Torremolinos, además de ser Presidente del C.D La Armuña, de Salamanca, quien completó el circuito en 1h03'06. Estamos hablando de la época en la que comenzaron a aparecer varias pruebas de atletismo que aun hoy siguen en vilo y, muy poco a poco, los atletas dejamos de ser gente rara que salía a correr; pero, aun así, en una ciudad pequeña como es Zamora, que hubiera una prueba de larga distancia como es una media maratón fue todo un acontecimiento y como tampoco estaba la cosa tan controlada como ahora, permitió que varios atletas tan jóvenes participaran en esta primera Media Maratón de Zamora. Como curiosidad, un compañero me mandó un recorte del periódico con la clasificación y un pequeño comentario sobre la competición, donde se decía que esta prueba no tendría muchas más ediciones respecto a aquella primera... y ya vamos camino de la 32. 

El Club Atletismo Zamora, de la mano de Teo de las Heras y Angel Martín, dos de aquellos primeros 23 atletas que corrieron en el 1984 la primera edición, sigue manos a la obra con la organización de esta Media Maratón "CIudad de Zamora". Año a año, el club organizador ha sido capaz de soportar las críticas negativas, en ocasiones muy negativas, que han recibido de los participantes. Tras unos años donde estas críticas han sido demasiado comunes por parte de los participantes, en los últimos dos años estamos viendo un resurgir de la prueba, que, tras unos años un poco oscuros, está volviendo a tener el éxito que tuvo, aunque, quizá, aun quede demasiado por adelantar, no por el gran trabajo que hace la organización (me consta que así lo es) sino porque es muy complicado retomar el éxito cuando se ha estado durante dos o tres años recibiendo críticas tan negativas como han recibido los organizadores, sobre en materias de circuitos. Debo reconocer que aquel que se hizo por la zona del carril bici y los Tres Árboles, al que se debían completar un par de vueltas, era un circuito bastante monótono (aunque también muy, muy plano), pero, quizá, desde la organización sí que se intentó hacer un circuito más llamativo para el atleta, como el de ahora, que es una gozada. Respecto al precio, me parece bastante acorde con lo que se ofrece para el atleta. En mi experiencia personal, he participado en carreras que, por un pecio proporcional más alto respecto a la distancia (por poner un ejemplo, 10 euros para una carrera de 10 kilómetros...) no daban nada para el precio que pedían por correr. En resumen, creo que poco a poco, el Club Atletismo Zamora logrará, en breve, recuperar por completo el éxito que ha tenido esta prueba.
Si hay algo que me molesta especialmente respecto a la media de casa, y que, dicho sea de paso, se está convirtiendo en algo habitual, es que pruebas de la misma distancia, pero de reciente creación, se están empeñando en hacer coincidir sus carreras con ésta. Este año ha tocado León, pero otros años lo hemos podido ver con Palencia, por ejemplo. La verdad es que creo que nos estamos equivocando, ya no solo porque este tipo de pruebas coincidan con la de mi ciudad, que también, sino porque, quizá, no nos hemos parado a pensar en una cosa. Si hacemos coincidir tantos eventos juntos, no todo el mundo va a poder disfrutar de las virtudes de cada prueba. Nos deberíamos plantear que está muy bien el hecho de que haya muchas carreras de atletismo, pero deberíamos pensar que si queremos ver en nuestra prueba a muchos participantes, no deberíamos intentar hacer competencia a otras pruebas, llegando incluso a hacerlas coincidir con otras de muchas más ediciones. Seguro que correr por las calles de Salamanca o las empinadas cuestas de Palencia, o poder correr por al Canal de Castilla (este domingo también se celebra una maratón por allí) es toda una gozada. Pero, si coinciden las medias de León y Zamora, y la maratón del Canal de Castilla, nos encontramos ante una situación muy compleja. ¿A dónde voy? ¿A dónde no voy? Mi opinión sobre el hecho de que llevemos ya unos pocos de años donde la media de Zamora coincide con otras, siendo ésta más antigua, es que no estaría de más pensar que, siendo Zamora la más antigua, deberíamos dejarle cierta preferencia. Recuerdo que hace pocos días leía en el Facebook un comentario de un habitual durante varias ediciones, César Portela, quien decía algo así como que qué tiempos aquellos cuando se comenzaba la temporada de medias en Zamora, y se juntaban muchísimos atletas de toda la comunidad a competir. Ahora, debido a esas coincidencias con otras pruebas, eso se va perdiendo. 
Para mi, ésta ha sido una prueba con cierta "magia". Comentaba ayer que mi primer contacto con esta carrera fue en la edición del 2009. Pues estaba equivocado. Mis primeros contactos son de antes, de cuando mi padre llegaba de su sesión dominical de bicicleta y me llevaba a aplastar las botellas que los participantes iban dejando a lo largo del recorrido. Yo no hacía ningún caso a los corredores, solo iba en busca de botellas que tuvieran agua para poder explotarlas. Luego, ya vino aquella edición del 2009 que comentaba en mi última entrada, para seguir con la de 2010, donde estuve repartiendo botellas de agua. ¡De explotarlas a pisadas a darlas en la meta! Pero, aparte de por ésto, he escuchado muchas anécdotas de esta prueba, de cuando competir era competir, cuando ésto tenia una magia especial por el carácter de los atletas, que salían a reventar a todo el que se pusiera a su lado, una forma muy diferente a la que vivimos ahora, de la que, aunque soy partidario, cada vez me voy alejando un poquito más para meterme de pleno en la otra parte, en la de competir, aunque este año aun tocará disfrutar. Aquellas anécdotas que Teo de las Heras, Berando Cabañas, Ángel Nieto o César Portela me han contado, ha hecho que ésta prueba sea diferente. Decir que he corrido o, mejor dicho, que voy a correr la prueba donde se han gestado muchas batallitas de varios conocidos, para mi es una gozada. 

Nos vemos... haciendo deporte, claro.

miércoles, 9 de marzo de 2016

Ultimando preparativos

Van pasando los días, y con ellos, los entrenamientos. A falta de cuatro días para hacer mi primera Media de Zamora, aquí sigo, alternando sesiones de series con otras de rodaje. Esta semana, en un principio, iba a entrenar como si no tuviera competición, por lo que, hasta mañana, voy a seguir cumpliendo con lo que tengo marcado, aunque, finalmente, me he decantado por hacer el sábado un rodaje de 10 kilómetros a ritmo cómodo y unas progresiones, para llegar algo entero al domingo y poder hacer los 21 kilómetros sabiendo que, aunque rodando, no voy a reventar. En una cosa de éstas puede pasar de todo, pero voy a intentar evitar un reventón metiendo un par de días previos bastante suaves (además de ese rodaje a ritmo cómodo, el viernes toca descanso). 
Cartel de la XXXII Media Maratón "Ciudad de
Zamora".
Esta semana la comencé rodando 10 kilómetros por Valorio. La idea era hacer un rodaje a ritmo cómodo, para soltar piernas del fin de semana. Pero el lunes salió. Me salió uno de esos días en los que las sensaciones acompañan y te ves suelto. Así que en un día donde anduve genial, completé 10 kilómetros en 40'53, a 4.05 min/km y 166 pulsaciones medias. Fui rodando por sensaciones hasta el kilómetro siete, y de ahí hasta el 10, a tope, pasando esos tres últimos kilómetros en 3'39, 3'23 y 3'42. El martes me puse manos a la obra con la primera sesión de series de la semana. Tras calentar cinco kilómetros y unas progresiones, me puse manos a la obra con la parte dura del día: 3x2000+2x1000. Las series de 2000 salieron en 6'42, 6'56 y 6'54, y las de 1000 en 3'23 y 3'26. Para soltar, un par de kilómetros cómodos. La verdad es que me creo que puedo estar satisfecho con los tiempos después de estar prácticamente desde principios de noviembre sin encadenar varias semanas con series, aunque aun queda mucho por mejorar hasta lograr volver a tocar los ritmos "de antaño". Para seguir, hoy me calcé las zapatillas con la idea de hacer un rodaje de 16 kilómetros por sensaciones, aunque al final acabé mirando bastante el pulsómetro. En un día donde las sensaciones para nada han acompañado, he completado 16 kilómetros justos en 1h11'48, a 4.29 min/km y 156 pulsaciones medias. 

Con María Díez en la II Carrera Popular de Chema Martínez, en
Villalpando.
 Éstos han sido los primeros tres entrenamientos de la semana. Aun nos queda un entrenamiento de calidad antes de la Media Maratón de Zamora, que será mañana. La idea es completar otra sesión de series largas (es sabido mi poco cariño hacia las series cortas). Será una sesión de series en pirámide, un entrenamiento que me gusta bastante. Luego, ya vendrán dos días muy suaves para recuperar del resto de la semana y para preparar a las piernas para la kilometrada del domingo por las calles de mi ciudad. El viernes está programado el día de descanso, y el sábado un rodaje de 10 kilómetros muy suaves y unas progresiones. Y para el domingo, 21,097 metros. 
Como comentaba al principio de esta entrada, mi idea para esta semana era entrenar como si el domingo solo se tratara de una tirada larga. Pero luego me he parado a pensar. 21 kilómetros, todos ellos por asfalto. Aunque, en mi caso, será una tirada larga, debo pararme a pensar que van a ser muchos golpes contra el terreno duro, y quizá me convenga más hacer el sábado algo suave que meter las cuestas que tengo programadas para ese día. Vamos, por lo menos a mi me parece más lógico hacer el sábado 10 kilómetros en vez de ese entreno en subidas, del que voy a acabar muy tocado y a lo que si le sumo los 21 kilómetros por asfalto, puedo acabar bastante tocado para la próxima semana. Mañana, por lo tanto, será la última sesión dura que haga esta semana. Como os comentaba, serán unas series en pirámide, uno de mis entrenamientos preferidos de series largas, pero que hace bastante que no hago, no sé si desde finales de diciembre o principios de enero. La verdad es que es un entreno durillo, pero en el que puedo decir que disfruto de las series, así que tendré que aprovechar.
Con Fermín Cacho en la Carrera Popular "Don Bosco"
de Valladolid.
Hablando sobre otras pruebas que no sean la Media de Zamora, tengo idea participar en varias, aunque creo que en alguna donde tenía previsto participar, no voy a poder hacerlo. Mis ideas para los próximos meses son la Carrera Popular de Faramontanos de Tábara, los 10 kilómetros que se harán en Toro por las Edades del Hombre, los 13.5 de Benegiles y el Cross Popular de Moraleja del Vino. A ésta última tengo unas ganas especiales de volver, tras las buenísimas sensaciones que tuve el año pasado, aunque debo reconocer que, de las que he mencionado, me gustaría participar en todas. Solo conozco la de Moraleja, pero, por la distancia y el ambiente que creo puede haber, me parece que son buenas opciones para ir retomando contacto con la competición y ver si los primeros entrenos de calidad van dando frutos. También tengo previsto competir de nuevo en la provincia de Salamanca, en concreto en Sardón de los Frailes, sobre 10 kilómetros, una prueba que, creo, puede llegar muy lejos viendo el circuito que tiene y lo que, según he leído, ofrece la organización. Las carreras que he corrido por esta zona siempre han estado muy bien organizadas, y ésta no creo que sea menos. Lo malo es que esta temporada me pierdo El Salvador y Peñausende, dos pruebas que me han dejado muy buen sabor de boca. Bueno, buen sabor de boca por regla general, porque debo reconocer que no me hizo demasiada gracia el hecho de que en la Carrera de El Salvador del año pasado nos cambiaran la distancia a los atletas de mi categoría de los 8000 metros que en un principio íbamos a correr, hasta 6000 metros. Me apunté porque siempre había corrido esa distancia, pero me disgustó que nos lo comunicaran estando tan encima de la carrera. En mi caso, hablé con la organización y me dejaron correr todos los kilómetros, pero no me hizo ninguna gracia ese cambio. Pero, aparte de eso, la verdad es que si logro correr en todas las carreras que comentaba antes, creo que sería sumar demasiadas pruebas juntas, por lo que me toca depender de alguna, y lo haré de las dos que ya he corrido en más ocasiones.

Nos vemos... haciendo deporte, claro.

martes, 8 de marzo de 2016

XXXII Media Maratón "Ciudad de Zamora" y entrenamientos

Llega marzo, y con él, podemos dar por comenzada la temporada de medias maratones y pista. En las pruebas de 21 kilómetros, aunque ya se han celebrado varias esta temporada, viviremos a partir de ahora unos muy intensos fines de semana, donde incluso podremos ver que coinciden varias en el mismo día o mismo fin de semana. En zonas cercanas a mi ciudad, ya hemos podido ver, por ejemplo, la de Salamanca, que se celebró el pasado fin de semana, con victoria para Antonio Cuadrado y Gema Martín. Una semana después,  este fin de semana, se celebrará la de mi ciudad, Zamora. Ya van treinta y dos ediciones desde que en aquel 1984 tan solo 23 corredores tomaran parte de la que sería la primera edición de esta prueba. Allí se dieron cita atletas que, a lo largo de los años, dieron (y alguno sigue dando) muchas alegrías al atletismo zamorano. Gente como Carlos del Bien, Teo de las Heras, Ramiro Morán o Aníbal Rapado fueron algunos de aquellos 23 participantes de la primera Media Maratón "Ciudad de Zamora". A lo largo de los años, esta media ha ido teniendo más participantes, aunque en alguna edición ha habido cierta reducción del número de inscritos, quizá en parte por el circuito que se hizo durante unas ediciones, dando dos vueltas a un circuito por el carril bici de Zamora. Entre esos inscritos también hemos podido ver a atletas de élite, como, por ejemplo, Sergio Sánchez en el 2007, quien entró en segunda posición con 1h09'12, o de Ramiro Morán quien, aparte de correr aquella primera edición, también vino a correr a su tierra estando en lo más alto del atletismo de competición. 

El Atletismo Zamora, siempre con el apoyo de Teo de las Heras y Ángel Martín, décimo y undécimo hace treinta y dos años en esta prueba, ha decidido mantener el nuevo circuito, que se estrenó coincidiendo con el festejo de los treinta años de esta prueba, hace ya de eso dos temporadas. Un circuito que, dicho sea de paso, es relativamente favorable. Digo relativamente porque, aunque tiene bastantes tramos llanos e incluso en bajada, no olvidemos que lo se baja, hay que subirlo, y a lo largo de los 21 kilómetros nos vamos a tomar con el Puente de los Poetas, del cual podríamos decir que, con mucha imaginación, tiene forma de "U" invertida (repito, con mucha imaginación, pero la subida puede hacer daño si vamos muy pasados de ritmo), con el Camino de Rabiche, en torno al kilómetro 13.5-14, la subida hasta la Plaza de Cristo Rey, que culmina en el 10... y un pequeño, repito, pequeño repechito en el carril bici, en el kilómetro cuatro. Que yo me de cuenta, no hay más. Pero, de verdad, hay medias que, en este aspecto, son muchísimo más duras. Bajo mi punto de vista, es una media en la que, si no hacemos barbaridades en unos puntos muy concretos y durante unos pocos de metros, podremos hacer una marca más que interesante. No digo que todos vayamos a correr a 3.00 el kilómetro (ojalá), pero si creo que podremos correr, al menos, al mismo ritmo que en otras medias, pero con la sensación de ir más cómodos.

Éste domingo, si no surge nada, estaré en la salida de la XXXII Media Maratón "Ciudad de Zamora". Salgo con un único y sencillo objetivo: disfrutar de la carrera. No tengo intención de sufrir ni lo más mínimo, me la voy a tomar como un popular más, o como un "runner", ese término inglés que están tan de moda actualmente, pero que yo, que debo ser muy de la vieja escuela, tanto me niego a utilizar, pues me gusta más, mucho más, el término "atleta popular", pero bueno. El hecho es que el domingo debutaré en la media de Zamora, de mi ciudad, de casa. Para mi, esta prueba tiene algo especial. Mi primer contacto con ella fue en 2009, cuando, al salir de casa para ir en busca de algo (no recuerdo de qué) me topé con ella y estuve un rato viendo a los atletas correteando. Escasos meses después empecé a entrenar con Teo de las Heras y, gracias a sus anécdotas, acompañadas también de muchas historias de compañeros suyos de fatiga, sobre todo de Bernardo Cabañas y Lete, acompañados por varias anécdotas de otros compañeros (Ramiro Morán, César Portela, Aníbal Rapado o Ángel nieto=, a los que he ido conociendo según me he metido en el mundillo, y que, por supuesto, también han sido espejos donde mirarme. Debo reconocer que, personalmente, para mi es una gozada poder participar este domingo en la Media Maratón de Zamora, precisamente por poder decir que he corrido una prueba donde los que han sido y siguen siendo espejos donde mirarme como atleta han tenido unas cuantas batallas. Y, además, por poder correr una de las medias más antiguas del país. No sé si será la mejor organizada o la que tenga mejor circuito, pero para mi... ¡es la mejor de todas!

Cambiando de tema, y sin querer que suene repetitivo, algo complicado, porque suelo basar en este tema muchas entradas, me gustaría escribir sobre los entrenamientos de calidad. Este último fin de semana me dio por contar cuántas semanas me quedan de temporada. Cuatro meses, 16 semanas. Lo justo para elaborar un plan de entrenamiento (sí, sí, otro más... ¡Toma ya!) que me ayude a recuperar, sobre todo, motivación para volver a competir como lo hacía con Teo y como lo hice en Bañobárez y el primer año que corrí en Peñausende. Físicamente sé que es factible. El problema, el de siempre, mi cabeza. Pero, ¿cómo leñes me cuesta centrarme tanto en algo que llegué a hacer casi por rutina? Me parece increíble cómo nos acomodamos al trabajo fácil en un espacio tan breve de tiempo, pero cómo nos cuesta volver a la parte dura para demostrar en carrera todo lo que haya que demostrar, cada uno a nuestro nivel. He tenido un montón de intentos fallidos no por motivos físicos, pues en cuanto he enganchado unos días de calidad he visto mejorías, sino porque me veía incapaz de superar los días malos. Mi cabeza se descentra rápido, y éso es lo que creo que debo buscar corregir, por encima de cualquier otro objetivo competitivo o cronométrico. Me he comprometido con mis padres y con Teo a que volveré a hacer series, por lo que me da que no tengo mucha escapatoria... Bueno, éso y que debo reconocer que, lo niegue o no, me apetece bastante volver a correr de otra forma, más organizado y con la idea de competir más fuerte. Bueno, éso digo siempre cuando digo que vuelvo... En fin, intentarlo, habrá que intentarlo. Sigo con mi estructura de siempre, tres días fuerte y tres suaves, aunque he decidido hacer varios cambios respecto a otras ocasiones. Creo que me vendrá muy bien, por ejemplo, el trabajo en cuestas, o hacer los lunes un rodaje más corto respecto a estas últimas semanas (bajo de 13 a 10 kilómetros). De cuatro semanas, haré tres fuertes y una suave, para recuperar de las tres previas. Será una semana de menos kilómetros, donde pasaré de hacer unos 90 kilómetros semanales a hacer en torno a los 70 en esa semana más suave. Las semanas de las carreras serán muy parecidas a esas semanas de recuperación, aunque sí habrá alguna diferencia. Os iré comentando cómo van los días. Por ahora, el fin de semana lo utilicé para mentalizarme un poco, haciendo el sábado 4x2000 a unos ritmos que no me esperaba, pero los tiempos "buenos" no son fiables al cien por cien, pues los hice en una recta, por lo que en dos series me daba en contra y dos a favor. El domingo volví a rodar con Carmelo 19 kilómetros, en un día también con mucho viento, pero con muy buenas sensaciones. El lunes, ya dentro de la tabla, tocó rodar 10 kilómetros, aunque debo reconocer que me piqué más de lo debido, y en vez de correr a 4.25-4.30, que era lo que tenía programado, acabé rodando a 4.05 de media. Pero... ¡un buen día hay que aprovecharlo! Y hoy, me puse manos a la obra con más series. En esta ocasión tocaron 3x2000+2x1000 recuperando tres minutos. Debo reconocer que he acabado muy, muy contento tras completar todas las series por debajo de los 3.30 min/km. ¡Quiero notarme todos los días como ayer y hoy!

Nos vemos... haciendo deporte, clar.

miércoles, 2 de marzo de 2016

Buenas sensaciones

Hoy me pongo a escribir con diferentes puntos de vista. La verdad es que llevo unos días donde me estoy encontrando realmente cómodo en los rodajes que estoy haciendo, lo que me da un punto extra de motivación, algo que me gusta, pero que me hace ver que, a la vez, me hace pensar que, quizá, llegue ese odiado día en el que me tocará dejar de corretear, y lo mucho que seguramente eche de menos todos estos kilómetros y buenas sensaciones. Pero voy a intentar pensar en positivo, algo que me cuesta demasiado, no solo en el deporte, sino en otros muchos aspectos (tiendo a ser muy negativo y pelín maniático...). ¿Qué saldrá de ésta?
Cartel de la XXXII Media Maratón "Ciudad de
Zamora".
Empezando por los entrenamientos, como suelo hacerlo casi siempre, esta semana he decidido organizarla un poco diferente. Tras la tirada larga del domingo en compañía de Carmelo, el lunes decidí hacer un rodaje no muy largo y a ritmo cómodo para recuperar de los dos días previos y para llegar descansado a los dos siguientes, donde he sumado bastantes kilómetros. Así, me calcé las zapatillas para hacer un rodaje de ida y vuelta por el carril bici, completando 10 kilómetros justos en 44'14, a 4.25 min/km. Llevo ya varios meses, más o menos desde la carrera de Carbajales, en el mes de noviembre, haciendo los lunes un rodaje de 13 kilómetros, y la verdad es que no me ha ido mal del todo, pero ahora he decidido hacer un cambio en organización de las semanas, y ya desde esta, empezar a hacer los lunes un rodaje como este, para soltar piernas. Siguiendo con lo que he hecho en lo que llevamos de semana, el martes me volví a calzar las zapatillas para volver a hacer un rodaje, ésta vez algo más largo. En un día maravilloso para corretear, con sol, muy buena temperatura y sin viento, logro completar 15 kilómetros en 1h07'12, a 4.28 min/km. Para seguir, llegó el rodaje de hoy, del que no he sido del todo el "culpable", por decirlo de alguna forma. El lunes coincidí con Teo en las pistas mientras veía entrenar a mi hermano. Estuvimos un rato hablando, y salió el tema de la Media Maratón de Zamora. Me comentó que sería interesante hacer un rodaje de unos 15 kilómetros intentando tocar las partes más favorables del circuito de la prueba. Le comenté que mi idea para ese día era rodar 16 kilómetros, que qué le parecía. Me comentó que perfecto. Así que hoy, un poco puedo decir que, dos años y medio después, he cumplido en cierta medida un entrenamiento bajo las órdenes de Teo. Es verdad que ya tenía previsto hacerlo, pero bueno, ha sido un entrenamiento que se podría decir que ha estado bajo la supervisión de Teo. Lo de hacer parte del circuito de la Media Maratón sí decidí dejarlo para ese día, pues ahora con el tráfico no me acaba de convencer. Me fui a dar la vuelta a Cabañales, donde coinciden unos cuatro kilómetros del circuito, completando un total de 16 kilómetros justos en 1h11'42, a 4.28 min/km. 
Como os comentaba, llevo unos días donde me estoy notando bastante bien. Puedo decir que estoy disfrutando mucho de cada rodaje y de cada kilómetro que estoy recorriendo por mis lugares habituales de entrenamiento. Ésto no deja de ser un punto más de motivación para calzarme las zapatillas cada día. Aunque suene un poco filosófico o sentimental, es uno de esos momentos que deseas que no se acaben, porque realmente ves que estás haciendo lo que te gusta, y disfrutando con ello. Y como creo que le sucedería a cualquiera cuando llega a este momento, no quiere que se acabe. En ello estoy yo, deseando que este momento disfrutando con los rodajes no se acabe nunca, que pueda seguir y seguir. Pero, por desgracia, tarde o temprano éstos rodajes se acabarán. Aun soy joven, y seguramente pueda esperar aun unos cuantos años hasta que me toque dejarlo. Por ahora, más o menos voy teniendo suerte y puedo seguir practicando a diario mi deporte favorito, con alguna molestia, pero nada demasiado importante y que, por ahora, me permite seguir haciendo varios kilómetros. No puedo quejarme, la verdad, pero sí debo reconocer que lo de ser un tipo tirando a negativo no es algo bueno, y cada vez que me pongo a pensar que algún día tendré que dejar de correr, posiblemente por las lesiones, no es algo que me guste demasiado, y que me hace pensar muy negativamente por mi futuro como deportista. Pero bueno, no voy a intentar meterme demasiado en este tema, voy a intentar disfrutar de estos buenos momentos. Por ahora, iré pensando en los próximos rodajes y en los próximos objetivos competitivos porque, no lo olvidemos, aunque ya no entreno con series, sigo siendo un "popular machacón". 
Hablaba en las últimas entradas del blog, aunque acabo reconociendo que fue un calentón, sin más, y que, por ahora, ésto se quedará como está, con rodajes. Pero sí me gustaría dar a conocer mi admiración hacia todos los que sois capaces de seguir un plan de entrenamiento, sea para cross, 1500, 5000, 10000, media, maratón... En mi caso, he perdido parte de esa capacidad para centrarme y para sufrir con entrenamientos serios. Me parece impresionante que seais capaces de hacer series y demás, sin saltaros nada de lo que tenéis marcado. Mi vuelta a un plan de entrenamiento está muy lejana, bastante más de lo que yo me esperaba, precisamente porque me veo falto de capacidad de sufrimiento y de mentalización para saber que en un par o tres días semanales me tocará sufrir con unas cuantas series, sean largas o cortas. Por eso, os admiro a los que sí sois capaces de hacer todo eso. Puede que me vuelva a poner de nuevo a entrenar en serio, aunque con muchísimos matices, entre ellos el de seguir siendo mi propio entrenador, porque, aunque no tengo demasiada idea de ésto, sí debo reconocer que creo es una muy buena forma de acabar conociéndonos, pues nadie mejor que el propio atleta para saber cómo va.

Nos vemos... haciendo deporte, claro.

martes, 1 de marzo de 2016

Medias maratones y crosses

Ya estamos en el mes de marzo. La temporada de cross va dando sus últimos coletazos con los campeonatos Nacionales, tanto a nivel individual como por clubes, y la temporada de pruebas de larga distancia ya empieza a estar casi en pleno apogeo. 

El pasado fin de semana hemos vivido una jornada bastante interesante con el Nacional de cross por equipos. No me dio tiempo a ver todas las categorías, pero sí me dio para algunas de las más interesantes. Debo reconocer que me hizo mucha ilusión ver a muchos conocidos a través de la pantalla: Alex González, Fernando Lorenzo o Alejandro Codesal fueron algunos de los compañeros a los que tuve la suerte de ver a través de la televisión. Creo que, a nivel individual, pudimos ver buenas actuaciones de los atletas, intentando dejar lo mejor situado posible a su correspondiente equipo. De entre todos, me gustó ver a Jesús Antonio Núñez. ¡Cómo luchó para dejar a su equipo en buen lugar! Quizá el esfuerzo de intentar alcanzar a los integrantes del primer grupo le jugó una mala pasada, pero me pareció digno de alabar el esfuerzo que hizo. Me gustó también ver a Ricardo Serrano entrar en tercera posición, al igual que ver a Daniel Mateo peleando en esta prueba. En mujeres, me hizo también muchisima ilusión ver a la atleta salmantina Gema Martín. He coincidido con ella en un par de ediciones del Cross de Ávila. Pura humildad y simpatía. Del Atletismo Zamora, solo tuvimos representación en la categoría Juvenil femenina, y creo que podemos hacer un balance bastante positivo de la carrera que hicieron nuestras chicas en el Hipódromo de la Zarzuela.

Hablando de medias maratones, el próximo 13 de marzo se celebrará la de mi ciudad. En esta ocasión además será Regional Absoluto y de Veteranos de la distancia. Con esta, serán ya treinta y dos años desde que unos pocos de la mano de Teo de las Heras apostaron por organizar una media maratón en Zamora. En aquella edición partieron 23 participantes, casi tantos como kilómetros tiene la prueba. Aquel año ganó Aníbal Rapado. Ramiro Morán también corrió aquella edición con 16 años. Año a año, esta prueba ha ido variando de circuitos, de ganadores y de número de inscritos, y en el año 2000 se hizo Campeonato de España de Media Maratón. Este año se hará el mismo circuito de los dos últimos años, un circuito bastante favorable para correr. En mi caso, y si no surge nada, este año debutaré en esta media. Siempre he dicho que mi primera prueba de 21 kilómetros sería la de Zamora, algo que he incumplido, pues ya debuté en la de Ávila. Ya el año pasado me animé a participar, pero me paré en el kilómetro 16 (de mi GPS, según los puntos de la organización, éste estaba algo más adelante). Para esta ocasión espero poder llegar hasta el 21. Hablando con unos y con otros sobre este tema, he escuchado opiniones de todo tipo. Algunos compañeros me han comentado que, metiendo tantos kilómetros semanales, lo suyo sería salir a darme caña e intentar incluso bajar de 1h20', mientras que otros me comentan que lo suyo sería darme caña en el 10.000 y dejar la Media de Zamora para hacer una tirada larga, a mi ritmo habitual de rodaje. Yo me inclino más por la segunda opción. Me parece que los 21 kilómetros aun son muchos kilómetros para salir a tope. Es verdad que estoy metiendo muchos kilómetros a la semana, pero también es cierto que solo son rodajes, kilómetros a unos ritmos a los que me encuentro cómodo. Sé que, forzando, puedo correr 8-10 kilómetros en torno a los 3.30-3.35, ya lo hice en el Cross de Ávila y la Carrera Popular "Don Bosco" (éso sí, luego estando un montón de días para el arrastre), pero me parece que correr 21 kilómetros a ese ritmo es casi imposible. Vale, puedo correr en vez de a 3.30 a 3.50, pero sería seguir rodando a unos ritmos que, como mucho, toco en dos o tres kilómetros mientras voy rodando, y meter una media entera, por muy favorable que sea, me sigue pareciendo una quimera. Por lo tanto, mi objetivo sigue siendo el mismo para Ávila: salir a disfrutar. Allí dije que haría 1h30', y así fue, pues mi tiempo en meta fue de 1h30'06. Si en Zamora hago ese mismo tiempo, pues genial. ¿Que hago más? Pues hice más, no se me va a venir el mundo encima. 

Debo reconocer que tenía previsto seguir un plan de entrenamiento. Me había calentado bastante con empezar a entrenar otra vez en serio. De hecho, ayer hice un rodaje regenerativo con intención de comenzar hoy con las series, pero creo que todo se quedará en eso, en un calentón. Me estaba empezando a preparar una carrera como hice con El Salvador hace ya un par de años, pero debo reconocer que, si me paro a pensar, estoy disfrutando de entrenar como lo estoy haciendo ahora, sumando unos cuantos kilómetros de carrera continua. No será la forma más adecuada de entrenar, ya lo sé, pero es lo que más me permite disfrutar de esto. Y como tengo claro que no voy a ser profesional ni a ganarme la vida con ello, he llegado a un momento en el que lo competir o no competir a 3.20, o volver a rodar a 3'50, me da un poco igual. Para éso tendría que volver a hacer un esfuerzo que ahora mismo no me permitiría disfrutar de esto. Prefiero centrarme en lo que sé que me va a permitir pasármelo bien mientras corro. Ojo, que no digo que no haya que hacer series, cada uno disfruta con una cosa, unos preferirán las series y otros, como yo, los rodajes. Para gustos, los colores. Lo que sí tengo previsto hacer es una pequeña modificación en la distribución de los kilómetros diarios. Aunque seguiré sumando más o menos los mismos kilómetros, los lunes por ejemplo variaré los habituales 13 kilómetros, que en teoría debían ser cómodos, pero que acababan siendo por sensaciones, y algunos días tensando más de lo previsto, por un rodaje de 10 kilómetros por sensaciones. Luego, iré calculando según vaya viendo, pero la idea es seguir sumando, como decía, más o menos los mismos kilómetros que estos días. Y una modificación es, en las semanas de las carreras, bajar de los kilómetros que solía hacer el día previo a la carrera (ésto de salir a competir sin objetivos provoca que uno entrene el sábado dándole igual lo que toque al día siguiente), por un rodaje como el del lunes y unas progresiones. Y es que, aunque no haga series, sigo teniendo esa facilidad para picarme. ¿Que un popular no se organiza los entrenos y corre solo por sensaciones y demás? Ya lo sé, pero debo reconocer que ésto es una manía que cogí hace bastante tiempo y que, por ahora, no tengo intención de quitar.

Nos vemos... haciendo deporte, claro.