miércoles, 18 de mayo de 2016

Entrenamientos estructurados

Desde la última vez que me ponía manos a la obra con unas series, han pasado unas cuantas semanas, donde mi único y principal objetivo ha sido el de acumular kilómetros y kilómetros, sin pensar en nada más. Durante este tiempo he participado en tres competiciones, una sobre 6000 metros y otras dos sobre 10.000. donde más a gusto he competido. Pero, al fin y al cabo, no me he planteado ningún objetivo "serio" para estas pruebas, solamente salir por sensaciones y ver qué es lo que podía hacer y hasta donde, y, es más, ni si quiera entrenaba esas semanas ni el día previo como si el domingo tuviera carrera. Pero, tras ver las buenísimas sensaciones en las dos últimas competiciones y en varios de los últimos entrenamientos, me estoy empezando a replantear varias temas deportivos. Cambio de entrenamiento, vuelta a las series y a preparar algún 10.000... Muchas ideas en la cabeza. Aunque, me pongo a pensar, y me doy cuenta de que me pasa como siempre, demasiadas ideas juntas, pero poca cabeza para mantenerlas... aunque lo mismo ahora cambie algo la cosa.

Van pasando los días y me pongo a reflexionar sobre qué es exactamente lo que quiero hacer. Durante estas siete temporadas me han dado muchos compañeros me han dado varios consejos sobre ésto, cada uno con su forma de entender el deporte, el atletismo, los entrenamientos y las competiciones. Algunos me siguen desde que empecé, y con otros he ido entablando amistad a lo largo de las temporadas. Y creo que ha llegado el momento de comenzar a pensar en los consejos de algunas de estas personas. La verdad es que han sido muchos conocidos los que me han comentado qué cosas hacer y qué cosas no hacer, pero me voy a ir a por los consejos de una serie de personas determinadas. De todos he intentando aprender, pero debo reconocer que hay un "grupo selecto", por llamarlo de alguna manera, cuya forma de decir sus consejos y la amistad un tanto especial que me une con ellos, provoca que hayan sido los "elegidos". Y, como decía, me parece que, después de estar tanto tiempo entrenando de una forma tan anárquica, debo comenzar a hacer caso a todo lo anotado en esta lista. 

Intentando sacar el máximo jugo posible a todos los consejos que mencionaba en el párrafo anterior, y juntando éso con las buenas sensaciones y los resultados de las dos últimas carreras en las que he participado, me he puesto manos a la obra con un plan de entrenamiento en la elaboración de un plan de entrenamiento. Vale, lo he dicho tantas y tantas veces que ésto ya suena repetido, y en parte lo es. El hecho, sin embargo, es que creo que, sobre todo, debo darme cuenta de que tengo que cambiar mi forma actual de entrenamientos si quiero poder volver a correr en condiciones. Al fin y al cabo, me sé la teoría y tengo los consejos, pero también es cierto que me toca la parte más complicada, y es la de mentalizarme, aunque, en cierta medida, tampoco debería ser así, porque, de querer realmente hacerlo, no debería por qué tener un excesivo problema, siempre y cuando tenga claro qué es lo que realmente estoy buscando, tener una mejoría y lograr andar muy bien en las competiciones, o, por el contrario, dedicarme, como estoy haciendo ahora, a hacer rodajes cómodos, por el mero hecho de salir a disfrutar de algo tan simple como es el correr. Ahora mismo, creo que es el momento de cambiar por completo algunos de los hábitos que he cogido, y empezar a estructurar todo como debe ser. ¿Por qué no?

Mi primer objetivo serán los 10 kilómetros de León. La preparación la comenzaré dentro de unas cuanta semanas (de hecho, aun no he acabado de organizar los entrenamientos), pero el hecho de que falte tanto tiempo no significa que no le esté dando vueltas al hecho de comenzar a hacer las series ya mismo. En un principio, esta semana la acabaré cómo está programada, pero, si la cosa no cambia, espero que la semana próxima pueda comenzar ya a hacer las primeras series. Lo que busco con esto es no llegar sin haber hecho nada a la preparación de León, no partir de cero en cuanto a entrenamientos de calidad, porque, viendo cómo estoy entrenando ahora y por mi cabeza, con los rodajes creo que tendré menos problema.

Resumiendo un poco. ¿Por qué todo esto? Por un lado, he estado echando de menos la competición durante las últimas semanas, pero debo reconocer que no tenía nada claro por dónde empezar a estructurar las cosas, por lo que lo he ido dejando, dejando y dejando, hasta que he llegado al punto donde creo que debo empezar a dejar de huir de eso, sentarme y empezar a darle forma a un plan de entrenamiento bien estructurado, con sus series y demás. Hecho de menos mis entrenamientos de series por la orilla del Duero, en las pistas de atletismo o a orillas del Duero, igual que hecho en falta el poder hacer un rodaje progresivo y acabar los últimos kilómetros tocando ritmos de 3'25 min/km. Y, por otro, me parece conveniente dejar de entrenar de una forma tan anárquica como lo he estado haciendo, y organizar todo un poco. Tampoco es tan complicado, y si ya lo he hecho antes, ¿por qué no hacerlo ahora? 

¿Y qué pasa con la bicicleta? Pues debo reconocer que la tengo un tanto abandonada... y sin mucha intención de retomar el hábito de salir con ella. ¡Quién me lo iba  a decir a mi, que incluso llegué a no participar un año en La Rosca por hacer una salida con la bici de montaña! Pero bueno, las cosas cambian, y lo que empezó siendo dejarla de lado durante una época en la que tenía bastantes exámanes cuando estaba estudiando tercero de la ESO, se ha convertido en una separación casi extrema, que me ha llevado a salir nueve días a lo largo del 2015 y ningún día en lo que llevamos de 2016. Sigo algo el ciclismo a nivel profesional y sub-23, pero debo reconocer que a una intensidad mucho inferior de lo que lo llegué a seguir (imaginaos cómo estoy, que me he enterado ayer que Joaquim Rodríguez no estaba corriendo el Giro, y cuando llevaban unas tres etapas me enteré de que Quintana tampoco estaba), y a nivel deportivo, no tengo previsto tocar la bici en exceso. Siempre digo que las lesiones me apartarán del atletismo y que, con suerte, podré pasarme al ciclismo, y ya haré todos los kilómetros que no he hecho hasta ahora, pero, mientras tanto, aprovecharé para seguir corriendo.

Nos vemos... haciendo deporte, claro.

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